sábado, 21 de enero de 2012

Con cariño de Poyella.

Hoy, con eso de que es la última historia programada, voy a explayarme. Os preguntaréis por qué, yo encantada os lo explico:

1º Porque lo que hace Señorito Infantil, no se debe hacer.

2º Porque me cae mal.

3º Porque me da la gana.

¡Comenzamos!

Esta historia tiene sus inicios en el Chat, dónde un muy “adulto” Señorito Infantil se cameló a mi amiga Kami. Empiezan a hablar, a conocerse, a contarse secretos frikis,… Hasta que un día D. Infantil le zampa a Kamikaze que le gusta, pero esta no quiere absolutamente nada con él.

Pasan los días, Señorito Infantil no para de tirarle los tejos a mi amiga, a decirle cosas “bonitas”, tontear, e incluso no se cansa de decir que quiere quedar con ella y conocerla.

Un buen día, los papeles se intercambian, ahora es Kami la que va detrás de D. Infantil, y este no le da ni la hora. Pero la cosa no acaba aquí, y es que aparte de estar tonteando con Kami, este tipo tonteaba con tres chicas más. Tres. Y yo me pregunto, ¿cómo es capaz un tío de estar tonteando con cuatro chicas a la vez?, ¿le gustan todas?, ¿no le gusta ninguna?, ¿aburrimiento? En mi opinión, eso es una falta de respeto porque mientras que una persona tontea con otra, le dice cosas bonitas y esa otra persona se las cree, pensando que es a la única que se lo dice, por detrás esa persona les va diciendo lo mismo a tres chicas más. Todas se sienten especiales, es todo una mentira, la única verdad de toda esta historia es que están siendo engañadas.

Después de confesarle esto, aún así quedan para verse… ¿WFT? No lo entiendo, aquí mi amiga fue tonta, tengo que decirlo, te dice que tontea con cuatro tías a la vez y tu incluso así, deseas verle. Mi no entender. Pero claro, quien entiende las cosas del querer... Ahora era Kami la que quería quedar con él y este le ponía excusas…

Llega el día del encuentro, van a pasear, risas por aquí, risas por allá, pero no aclaran nada. ¿Entonces para qué quedan os preguntaréis? No lo sé, yo también me lo pregunto. Kami vino decepcionada de la “no cita”, y Señorito Infantil volvió… Tampoco lo sé, ni me importa.

Ahora las cosas están un poco frías desde que se vieron, hablan poquísimo, apenas hacen bromas, y cuando hablan, siempre salen peleando y dejándose de hablar durante unos días hasta que él no puede más y vuelve a dirigirle la palabra. Bien hecho Kami, hay que ser fuerte (antes no era así, siempre terminaba hablando ella primero, se acababa arrastrando ella…).

Tengo que decir dos cosas, bueno… tres.

1º: No entiendo esta relación amor-odio que tenéis, bueno, ni yo ni nadie.

2º: No vas a dejar de caerme mal, le has hecho daño a mi amiga y eso no te lo consiento. Por otro lado, solo hay una cosa de todo lo que has dicho/hecho que me ha gustado, y es llamar fea a D.

3º: Nunca, si en un futuro llegáis a tener algo (que lo dudo), tendrás mi aprobación. No te la mereces.

Escrito por: Poyella.


sábado, 14 de enero de 2012

Desde Londres con amor

Pues nuestros protagonistas de hoy se conocieron en el “Chat” ya mencionado en anteriores ocasiones y el principal punto de inicio de muchas de nuestras historias.

Poyella y Melendi (se le apoda así por su melena, qué más quisiera él ser la mitad de lo que es mi Melendi) en ese momento se encontraban en una situación similar, ambos estaban sufriendo por otras personas y ese fue el vínculo que les unió.

Los dos se sinceraron y se contaron mutuamente sus desavenencias en el terreno amoroso, hasta llegar al punto de apoyarse el uno en la otra y viceversa en los malos momentos.

He de decir que esto es de admirar, puesto que contar con una persona que te ayude en los malos momentos o te brinde su apoyo es algo que pocas personas poseen.

Es así como se fue forjando una buena amistad o eso parecía.

Suele pasar en ocasiones que cuando pones tanta confianza en una persona empieces a confundir sentimientos. Y esto fue lo que le sucedió a Melendi.

En uno de esos días en los que estaban conversando sobre lo desgraciados que eran, al melenas no se le ocurrió otra cosa que decirle a mi amiga que le gustaba (lo gracioso no es que le gustase mi amiga, sino que le gustase ella y otras dos más).

Mi amiga no echo mucha cuenta a esto, puesto que no le encontraba la lógica a que le gustasen tres chicas distintas y por ello se lo tomo más bien a broma.

Una noche apostaron que quién aguantase más despierto le enviaría un libro al otro, la apuesta la ganó Poyella porque él se dejo, pero a la ganadora no le parecía bien que ella se llevara el premio en esas condiciones así que hicieron un trato: se prometieron regalarse un libro cada uno.

Poyella le compró a él “Canciones para Paula” (tras sacarle dinero a su madre y pedirme a mí el resto) y se lo envió a la dirección del chico (aunque yo le hubiera regalo un vale para la peluquería).

Melendi prometió regalarle a mi amiga “Si me dices ven lo dejo todo, pero dime ven” y digo prometió porque a Poyella no le ha llegado nada, según él porque no tenía pasta.

Meses después volvió a salir el tema y él le pidió a ella su dirección (la cual le había dado ya anteriormente). Mi amiga no se la volvió a dar, puesto que si no se lo había enviado a esas alturas era porque a él le importaba bien poco el trato.

En navidad sus majestades los Reyes Magos, dejaron en el árbol del melenas un regalito para mi amiga. Y le volvió a pedir su dirección pero el resultado fue el mismo.

Y es que las cosas han de hacerse a su tiempo, no debemos dejar nada para el final siempre que podamos hacerlo antes, ya que generalmente el resultado no va a ser bueno (sino decírselo a mi examen de Historia dentro de unas semanas, deseadme suerte aunque no creo que eso sirva para mucho)

Escrito por: Kamikaze.


sábado, 7 de enero de 2012

Ocalimocho.

Todo empezó cuando nuestra queridísima D queda en que tres tíos vengan a conocerla. Deciden irse a su campo, y como esta no quería quedarse sola con tres machotes, invita a Mosquita Muerta, a Kamikaze y a mí, a que nos fuéramos con ellos a pasar la noche al campo.

MM y Kami aceptaron sin poner mayor objeción, en cambio, a mi no me parecía buena idea. No veía bien pasar toda una noche encerradas en un chalet con tres tíos mayores (veintitantos años…) que no conocíamos de nada.

Llega el día y allí que nos vamos nosotras, al llegar D y MM tienen que irse a recoger a estos chicos porque se habían perdido, no sabían cómo llegar al campo; así que Kami y yo nos quedamos solas en el campo. Cerramos la puerta con pestillo, asustadas ideamos un plan: cuando llegaran, no abriríamos la puerta hasta que no viésemos que pintas tenían. Pasan los minutos, cada vez más aterradas, tardaban mucho, pensábamos que les podrían haber hecho algo a nuestras amigas… Como unos veinte o treinta minutos después, vemos coches llegar, el primero en entrar fue el Audi de Mosquita Muerta y luego, el BMW de los invitados (encima tenían pasta).

Se presentaron, nos conocimos, y empezamos a hablar, nos contaron a que se dedicaban, uno era un famoso DJ, otro (señorito de una noche de verano) se dedicada a las carreras ilegales de coches de lujo y el tercero era un niño de papis ricachones.

Va pasando la noche, entre risas, hasta que yo decido irme, mal hecho por mi parte porque me perdí toda la fiesta… Dish…

A las tantas de la madrugada, empiezan a jugar a “Ocalimocho”, el cual consiste en tirar un dado y mover ficha (como el típico de Oca en Oca pero bebiendo), en vez de decir “de oca en oca y tiro porque me toca”, decían: de oca en oca y bebo porque me toca. Así, chupito a chupito, cada vez estaban más contentos y dicharacheros. Cuando ya algun@s no pudieron más (estaban hasta arriba, incluso, alguien se chocó contra un ventilador. Se notaba que no veía bien…), dejaron de jugar; D se fue con su “amigo” a una de las habitaciones a jugar a los médicos, Kami y Señorito de una Noche de Verano, deciden por separado (pero acabando en la misma cama) irse a dormir a la otra habitación, dejando en el salón a Mosquita Muerta y a DJ Rocco sentados cada uno en un sofá.

Kami no se esperaba que ocurriese lo que ocurrió, no sabe como terminaron en la misma cama, ni tampoco sabe como empezaron a besarse. La temperatura empezó a subir…

Y no es lo que todos pensáis, no, no fornicaron. Kamikaze se apartó a tiempo y el chico respetó su decisión. ¿Qué creíais? Kami no se acuesta con cualquiera, por algo aún es Soltera y Entera.

D lo pasó súper bien jugando con su amiguito; MM, tras negarse varias veces a hacer nada con el otro tipo, que no merecía la pena en absoluto, se fue a la cocina a beber Shadys, y, Kami y Señorito de una Noche de Verano se quedaron dormiditos en la misma camita hasta el amanecer.

PD: Kamikaze no se acostó con el tío este porque no quisiera, de hecho el tío tenía un polvazo, sino, porque es una buena chica. SNV tenía novia, aunque mucho no le importaría si iba a acostarse con otra chica que acababa de conocer.

Escrito por: Poyella.